Ellas, sólo ellas, las que siempre están ahí para sus hijos, no importa la edad ni el momento. Ellas, las que se sacrifican día tras día, y en ocasiones, toman decisiones que impactan y afectan a sus vidas sólo para que sus hijos sean realmente felices.
Ellas, las que creen que no hay amor más grande que el que sienten por sus bebés y luego se van dando cuenta de que con cada paso del camino, su amor tiene más y más intensidad. Ellas, las que ceden su papel protagonista para vivir comunión, graduación, primer trabajo y boda, entre otros, desde un segundo plano y con ternura.
Ellas, las que se merecen no un día sino los 365 del año celebrando y homenajeando su amor incondicional. Ellas, las que pocas veces prefieren otro plan que no sea disfrutar de un rato con sus hijos. Ellas, las que te siguen llamando «mi niña» o «mi niño» aunque superes los 40.
Ellas, a las que les gusta llevar muy de cerca el nombre de los suyos, a la altura del corazón, símbolo de su cariño. Para ellas, eme ha realizado muchos encargos personalizados, grabando medallas con los nombres de su prole. Un regalo muy especial.
Madres y todas aquellas mujeres que no son madres biológicas pero que han cuidado con dedicación, abuelas y tías, a todas ellas: feliz día de la madre.

