Cuando decidí iniciarme en esto de la joyería fue porque siempre me había llamado la atención y es que reúne varios factores que me despiertan interés desde niña.
Por un lado, la artesanía. Todas las actividades meticulosas, detallistas, en definitiva, manuales, me parece que activan una creatividad y sensibilidad especiales.
Por otro lado, las piedras, que desde tiempos ancestrales han aportado numerosos beneficios al cuerpo y a los sentidos, ¡por no hablar simplemente de lo bonitas que son! Siempre se me ha ido la vista hacia ellas.
Por último, la moda, pues las joyas son poderosos complementos que pueden hacer brillar un estilismo o por el contrario echarlo a perder.
Y es en este último punto donde vamos a centrarnos hoy, puesto que ya me toca despedirme del verano y las vacaciones para volver a la rutina definitivamente. No suelo ser protagonista de las historias que me gusta contar aquí pero hoy será una excepción porque vamos a hacer un repaso de looks estivales; mis estampas del verano en mi querida Gran Canaria en las que las joyas han sido mis mejores accesorios.
Tejeda, Maspalomas, Mogán… Bonitos escenarios de mi tierra que me han recargado la energía. Un fuerte abrazo a todos
- Pendientes de Turquesina y baño de oro amarillo sobre plata. Acabado pulido.
- El cuarzo rosa refuerza la feminidad y elegancia ¡incluso en bañador!
- Pendientes de botón. Plata bañada en oro amarillo y acabado mate.
- Pulseras que destacan el bronceado
pulsera de botón y pulsera de ámbar y cristal checo. Pendientes silueta de corazón.
- Gargantilla de pececito, medalla grabada y pendientes de botón. Todo de plata matificada.
