¡Buenos y navideños días!

Llegó una época muy especial del año y que para nadie pasa desapercibida, para unos es la más especial porque se reúnen con sus familiares y amigos, celebran, regalan, disfrutan. Para otros es una época triste que les recuerda que hubo tiempos mejores. En cualquier caso es una época mágica que te hace reflexionar y pasar tiempo con los tuyos.

Cada vez conozco más gente que cumple años en estas fechas, ¡vaya puntería! es el caso de María José, protagonista de este post. María José y yo nos conocemos desde hace unos 7 años aproximadamente, un tiempo suficiente para saber cosas especiales sobre esa compañera y amiga, como por ejemplo que siente fascinación por las Aguamarinas. De ahí que no pude resistirme cuando vi una Aguamarina preciosa en una tienda donde consigo piedras, me recordó a ella, así que me la llevé.

Con esa piedra tan bonita en la mano comienza el proceso de crear una joya: pensar qué se podía hacer con ella, en qué pieza me la imaginaba mejor: un anillo, un colgante, etc, qué metal me pegaba más para María José y para la gema: plata, oro amarillo, rosa, blanco… Finalmente lo vi claro: un anillo de plata. Tenía que ser un anillo sencillo en el que lo que resaltara fuera la piedra, una sortija sencilla, elegante y no muy grande porque mi amiga tiene las manos pequeñas, toda ella es tamaño mini :)

Pero como la joya es para otro y no para uno mismo, una vez que tuve el diseño lo compartí con ella. Ya había hecho anteriormente algún anillo de este estilo (puedes encontrar uno con Amatista aquí: http://emejewels.com/gf/shop/anillos/3-anillo-gota-de-amatista.html), así que fue sencillo mostrarle lo que tenía en mente. Le gustó y me puse a trabajar.

 

El primer paso, una vez que tenemos estirada la plata y hemos dado forma al anillo, es limar para darle la forma de la llamada "media caña"

Una vez medido el dedo y con la plata estirada, empezamos a hacer el anillo. Le damos la forma redonda y lo soldamos para, después, empezar a limar y lijar hasta tener la plata tal y como queremos. 

Una vez hecho el anillo, se hace una boquilla a medida de la piedra y se suelda a la pieza

Una vez hecho el anillo, se hace una boquilla a medida de la piedra y se suelda a la pieza. Da un poco de pena al principio porque para soldar la boquilla hay que cortar el anillo que ya hemos hecho ;)

El último paso es soldar las patitas a la boquilla

Lo siguiente es limar poco a poco la pieza que hemos hecho para darle la forma de la llamada «media caña», que básicamente significa que la plata no tiene forma recta sino curva. Una vez hecho eso, el último paso es soldar las patitas a la boquilla

 

¡anillo finalizado!

Con la pieza ya terminada, sólo hay que pulirla y llevarla a engastar… ¡Anillo finalizado!

 

La Aguamarina es una piedra especial porque digamos que es «multifunción». Se suele decir que favorece la comunicación y la expresión creativa de la persona que la lleva, manteniendo limpio el puente entre los chakras del corazón y de la garganta. Además se usaba antiguamente como elemento curativo, ya que se decía, y muchos sostienen actualmente, que calma potentes sentimientos como la soledad y la pena y alivia inflamaciones a su portador.

 

María José con su anillo de plata y aguamarina, fabricado especialmente para ella

María José con su anillo de plata y aguamarina, fabricado especialmente para ella

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